La economía permanece contraída

decrecimiento de la economia española

El INE (Instituto Nacional de Estadísticas) ha informado hoy en sus «notas de prensa» que el PIB ha caído un 4.2 por ciento en la variación interanual y un 1.1 por ciento en la variación intertrimestral. En ambas situaciones una décima por debajo de lo anunciado días atrás y que nosotros hiciéramos referencia.

A este dato hay que agregarle que el desempleo en España se encuentra en el orden del 7.1 por ciento. Esto en palabras del Instituto significa una disminución neta de casi 1,369 millones de puestos de trabajo a tiempo completo en un año. Dato no menor si uno lo analiza como factor clave para que la economía española registre un decrecimiento.

Esto no deja de ser un resultado económico esperado: las personas al no tener ingresos suficientes, dejan de consumir. A su vez cuando esto ocurre, la producción de bienes y servicios se paraliza, con lo que los empresarios dejan de contratar mano de obra y así va generándose un círculo vicioso, en donde el Estado debe intervenir con políticas de Estado expansivas.

Estas políticas pueden ser la de subsidiar los precios, intentando alentar al consumo; promoviendo la generación de puestos de trabajos con exenciones fiscales y/o cargas patronales. Pero estas son algunas de las medidas que se deben tomar, ya que se debe apoyar a las empresas en la inversión de tecnología para un crecimiento real de la economía, por ejemplo.

Tal como lo mencionó Javier en el consumo, el pbi y la bolsa los datos macroeconómicos de España no son muy alentadores y es por ello que el Gobierno deberá trabajar duro para sanear la economía del país.

Pese a estos datos y a algunas críticas realizadas como la de Cristóbal Montoro (responsable de Economía del PP); la calificadora de riesgo Moody’s mantiene la calificación triple A (AAa), lo que da a entender que España es uno de los países más estables y solventes: curiosamente, los elevados niveles de fortaleza financiera a nivel de economía, instituciones y Gobierno hacen que España tenga tan alta calificación por parte de una de las tres instituciones más relevantes del mundo.

Esta calificación es un buen punto de partida para atraer inversiones y comenzar a hacer funcionar a la «maquinaria» que se encuentra parada desde hace tiempo.

Datos de interés:Notas de Prensa del INE

Foto: INE

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