Vivienda, continua el desplome

Vivienda

Los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) no dejan lugar a dudas y nos alejan de toda visión optimista: el sector de la vivienda sigue hundiéndose. El que había sido el principal motor económico de los últimos años sigue con fuertes descensos y se coloca en sus niveles más bajos desde las serie de datos recogidos a partir de 2007 por el INE.

Así, la compraventa de viviendas cerró enero con una bajada del 38,6%, en el que se hicieron 37.931 operaciones y acumula tres meses de caídas. El mercado de casas de primera mano es el que ha acelerado el ritmo de su caída que se ha doblado: del 14% que bajó en 2008 ha pasado al 29,1 % en enero de 2009. En conjunto 2008 acabó con un descenso de las ventas del 28,6%, pero entonces era la vivienda de segunda mano la que más caía. Ahora se han girado las tornas y ha empezado el verdadero ajuste de la obra nueva, que ya se veía venir por los datos de las preventas.

La reducción en la compra de casas es la más fuerte de los últimos meses y se sitúa al mismo nivel que en el peor mes de 2008, cuando las compraventas bajaron un 38,6%. Aún así, si miramos la tasa intermensual, la comparación entre diciembre de 2008 con enero de 2009, las ventas de casas han crecido un 17,1%.

La vivienda usada es la que más cae, un total del 47,2%, mientras las viviendas nuevas bajaron un 29,1%. El 88,4% de las operaciones de compraventa de viviendas efectuadas en enero se realizaron con viviendas libres y el 11,6% restante con viviendas protegidas. Las zonas en las que más viviendas se vendieron por cada 100.000 habitantes fueron La Rioja y Extremadura, con 193 y 156 ventas, respectivamente. El 56,5% de las compraventas de viviendas efectuadas en enero se registraron en Andalucía (8.418 operaciones), Comunidad Valenciana (4.762), Madrid (4.170) y Cataluña (4.095).

Ante esta situación los precios se empiezan a corregir con descuentos que van del 10 al 20%, dependiendo de la negociación que realice el hipotético comprador con los vendedores.

Pese a estos descuentos, las ventas no se reactivan debido a las dificultades que existen para que los bancos concedan hipotecas. En muchas promociones no se acaban de realizar las ventas porque, a pesar de haver abonado pagos, cuando los compradores piden el préstamo, los bancos se lo deniegan. Esta situación, está llevando a que los promotores paralicen la construcción de nuevas viviendas. Un fenómeno que se empezó a notar dramáticamente en setiembre de 2008. De hecho, se calcula que hay un stock de un millón de viviendas sin vender.

Es imposible precedir hasta donde llegará el ajuste de los precios, pero los descensos están llegando ya al precio del suelo urbano que, según el Ministerio de Vivienda, ha descendido en un 10,5 % en el último trimestre de 2008.

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