Como negociar la hipoteca

negociar la hipoteca

En estos momentos, el Euribor parece que juega a favor de quien piensan en comprar una vivienda o de quienes ya la tienen pero han de pagar religiosamente su cuota cada mes. Pero tanto en un caso como en el otro, éste puede que sea un buen momento para pensar en negociar la hipoteca, y es que en instantes como el actual en que las necesidades aprietan, todo lo que suponga recortar nuestros gastos bienvenido será.

Esta negociación habremos de tomárnosla, dentro de la seriedad que merece, como un juego entre dos contrincantes, cada uno de los cuales intentará barrer para casa. En nuestro caso, y con el momento actual, debemos tener claro, que a ningún banco le interesará perder un cliente, y que por ello, se mostrarán más abiertos a retenerlo aún a costa de perder un poco de dinero. Por esa misma razón, puede que nos resulte más sencillo renegociar nuestros préstamos con la entidad.

Por otro lado, y para los que van a comenzar ahora su relación con una Entidad Financiera, porque hayan pensado en invertir en un piso, la situación es más complicada porque precisamente ahora las condiciones que nos piden los bancos para concedernos un préstamo son mucho más exigentes que hace un año.

Sea como sea, todo pasa porque conozcamos bien la oferta hipotecaria existente, las condiciones de mercado, y sobre todo, porque adoptemos un talante firme y seguro de nosotros mismos y nuestras posibilidades. Y siendo así, habremos de reconocer unas fases por las que pasa toda negociación de cualquier préstamo:

  • Fase preliminar

Ya os la hemos adelantado. Actitud firme y segura. Conocer la oferta que hay en el mercado y lo que nos dan los diferentes bancos nos dará aplomo para sentarnos frente al comercial y pelear por nuestras condiciones. Tened en cuenta que si el comercial capta que tenemos dudas o nos ve tímidos, nos llevará a su terreno y será más difícil la negociación para nosotros.

El primer paso, entonces, será que hayamos averiguado por Internet (que para eso lo tenemos) qué ofrecen los diferentes bancos, y conociéndolo que sepamos más o menos qué necesitamos: cantidad, plazos, tipos de interés…

  • Fase activa: recoger ofertas hipotecarias

Llega la hora de echarnos a la calle y visitar a aquellas entidades financieras que creemos que pueden ser más adecuadas para nosotros. Una vez sentados frente al comercial, deberemos dejar claro lo que necesitamos y esuccharlos atentamente, planteándoles todas las preguntas que se nos ocurran, pero sin dejar que lleven la voz cantante. Es importante, tenedlo claro, que no mostréis ninguna predisposición por su oferta. nada de aceptarla aún, porque primero debemos escuchar a varios, y si es posible, hasta indicarle al comercial que estáis estudiando otras ofertas, para crearle competencia.

En esto momentos, no olvidéis que es más difícil regatear porque los patrones que les marcan a los comerciales son más estrictos, pero aún así, os sorprenderá saber hasta dónde puede estirar una negociación bien llevada y los recortes de costes que podréis tener.

En esta fase, procurad recoger una buena gama de ofertas de diferentes bancos.

  • Fase de selección

Con todas las ofertas en la mano, iros a vuestra casa y elegid las que os parezcan las tres mejores. Buscad tranquilamente en qué puntos podréis recortar gastos y dónde podréis regatear con el comercial. Si demostráis que podéis llegar a ser un buen cliente para el banco, y mostráis esa seguridad, el banco hará lo posible por reteneros. Dejad también claro que tenéis dos o tres ofertas en vuestras manos, y que sólo os queda decidiros entre alguna de ellas…

  • Fase final: cierre de la operación

Tan importante ocmo todas las anteriores fases es ésta del cierre. Es la culminación al trabajo realizado. El momento en que deberéis darle «una última vuelta de tuerca» e intentar ese último recorte. Eso sí, tened clara la decisión y mostráos firmes con ella. Cuando vayáis a cerrarla debéis tener claro que ESA es la operación que buscábais.

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